viernes, 14 de agosto de 2015

NO DOGS AT THE MOVIES


"Matan nazis, gitanos, indios, judios, curas, ladrones, policias y proxenetas-
Matan alimañans, dragones, reyes, paraliticos, vampiros, brujas, jueces, deportistas, presidentes y soldados.
Matan niños chinos y explotan aviones con pasajeros.
But they dont kill dogs at the movies"

 fragmento del libro "Paciencia infinita" de Boris Camel

Investigo en casa, me informo. Clasifico informacion, Hablo con gente cuya opinion el mercado respeta. Voy a bibliotecas y mando mails y cartas. El fenomeno me atrapa una vez mas.
Buscando datos sobre la vida sexual de los ciegos me pregunte que hace el perro de un ciego cuando el ciego logra un home run. Lo mira? lo guia? Se calienta?
Lianas, las palabras son lianas y el escritor es un Tarzan movido por un ritmo unico. Llego a una isla solidamente fria y desierta y me encuetro ante la madre de las preguntas: why they dont kill dogs at the movies?
Primero este planeta fue hielo, luego mil cosas mas hasta llegar a concentrar jugo de ponelo Tang en polvo.
La vida es un regalo doble mano. Anoto: morir debe ser muy parecido al estado en el que estas antes de nacer.
Comprendo la lucha por una hembra. Comprendo que la belleza duele, Comprendo las letras y los colores. Y sus combinaciones. Me gusta la musica y el agua. Me gustan las hienas en manada riendose.
Un caballo se ahoga en arenas movedizas, una cabeza de caballo en la cama de un director de peliculas. Mueren cada tanto estas bestias en las peliculas. Explotan y estallan.
Pero los perros: ellos han logrado un status unico: no mueren perros en las peliculas.

Continuara.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Old Yeller, del 50 y pico es una para pendejos. Ahí muere un perro. Como en El Malevo de Argentino Luna. En La historia sin fin muere lo que se supone era un perro. Marley and me, una poronga de película donde también hacen cagar al perro pero como buena película NORTEamericana se trae bajo la muerte un mensaje alentador. En fin, a los perros también los matan en las películas. Pero son pocas, porque matar a un perro es difícil siempre. Para mí incluso imaginarlo. Prefiero el morbo de liquidar a un niño que a la larga imaginamos puede convertirse en algo perverso. Aunque a la corta ya lo es.